NUEVAS INICIATIVAS ECLESIALES (3)

Familia espiritual “La Obra”

Ordo Virginum

Cooperadores de la verdad de la Madre de Dios

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La Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica (CIVCSVA), cuyo Prefecto es el Cardenal De Aviz, organizó un Congreso internacional, concluido el 7 de mayo de 2018.

Además de Mons, José Rodríguez Carballo, OFM, Arzobispo Secretario, intervino Jeanne Marie Cooper, 33 años, consagrada del “Ordo Virginum”, juez y coordinadora del tribunal matrimonial en la Diócesis de Winona-Rochester y el californiano Kris Van Damme (n. 1987), consagrado de la Familia espiritual “la Obra”.

Familia espiritual “La Obra”

Logo de La Obra

Es un nuevo Instituto aprobado de Derecho Pontificio y comunicado por el entonces card Ratzinger, Prefecto de la CDF en una Misa de acción de gracias por ello en noviembre de 2001.

Fue fundada en Bélgica, en 1938, por la “madre” Julia Verhaeghe (+1997 con 87 años), y está compuesta por una Comunidad de mujeres consagradas y una Comunidad sacerdotal, a la que pertenecen sacerdotes, diáconos y Hermanos laicos.

La espiritualidad de «La Obra» se caracteriza por un fuerte sentido bíblico, sacramental y eclesial. Está también comprometida en la “nueva evangelización” promovida por Juan Pablo II, y se dedican a trabajar en parroquias, centros de Asistencia médica, social o pedagógicos, Etc.

«La Obra» está comprometida en la promoción de la persona y el pensamiento del Cardenal John Henry Newman (+1890 con 89 años), conocido converso inglés que fue beatificado por Benedicto XVI en Escocia el 19-09-2010.

Ordo Virginum

Una de las múltiples formas de vida consagrada, nuevas realidades en la vida de la Iglesia que actualizan las praxis de los primeros cristianos, cuando no había “congregaciones religiosas” tal como hoy día aparecen en el Derecho Canónico.

Entonces eran cristianas que vivían la virginidad como se mencionan por los Hechos de los apóstoles, por san Pablo y unos Santos Padres como san Jerónimo, san Cipriano, san Ambrosio, san Agustín, san Juan Crisóstomo o san Atanasio

El 15 de mayo de de 2008, Benedicto XVI recibió a las participantes en su II Congreso de vírgenes consagradas y les recordó “lo que dije en otra ocasión sobre vuestra realidad de mujeres que viven la virginidad consagrada en el mundo: un don en la Iglesia y para la Iglesia”.

(…) Sus raíces son antiguas: se remontan a los inicios de la vida evangélica, cuando, como novedad inaudita, el corazón de algunas mujeres comenzó a abrirse al deseo de la virginidad consagrada, es decir, al deseo de entregar a Dios todo su ser (…) vuestro ideal, en sí mismo verdaderamente elevado, no exige ningún cambio exterior particular. Normalmente, cada una de las consagradas permanece en su propio ambiente de vida. Es un camino que parece exento de las características específicas de la vida religiosa (…) la vida virginal recuerda a las personas la transitoriedad de las realidades terrenas y la anticipación de los bienes futuros. Sed testigos de la espera vigilante y operante, de la alegría, de la paz, que es propia de quien se abandona al amor de Dios. Estad presentes en el mundo y, sin embargo, sed peregrinas hacia el Reino

Simplemente tienen que ser consagradas por su obispo diocesano y se realiza con un rito parecido al de los primeros cristianos.

Cooperadores de la verdad de la Madre de Dios

Ceremonia inaugural en la catedral de Valencia

Recogiendo las indicaciones de la Congregación de Institutos de vida consagrada y Sociedades de vida apostólica, fue erigida canónicamente  en la catedral de Valencia la nueva Congregación de derecho diocesano el 8-IX-2010, fiesta del nacimiento de María. Fue iniciada por 22 religiosos que dejaron de ser “escolapios”. Para la nueva fundación han elegido uno de los lemas de Benedicto XVI: “cooperatores veritatis” (cooperadores de la verdad).

El arzobispo de Valencia acogía este grupo de 4 jubilados, 5 seminaristas y 13 más que prefirieron seguir el carisma de los “kikos”; el Vaticano les pidió que decidieran si una cosa (escolapios) u otra (kikos) pues son sensibilidades diferentes. Siguen con su tarea educativa entre los niños y los jóvenes con un(os) inmueble(s) ofrecidos por el arzobispado valentino y se encargan de una parroquia en la ciudad de Valencia.

En paralelo ha nacido la organización civil “Fundación Pietas et litterae”, registrada en la Consellería de Justicia de la Generalitat Valenciana, constituida por familias vinculadas a estos religiosos y que no pertenecen a ninguna iniciativa de grupo o movimiento eclesial. El lema “piedad y letras” es uno de los de san José de Calasanz, fundador de los “escolapios”.